Nara seguía sentada en su escritorio, con el iPad en la mano y una taza de café que ya empezaba a enfriarse a su lado. Una notificación en su correo personal hizo que alzara una ceja. Al abrirlo, una sonrisa torcida brotó en su rostro.
“Finalmente tengo la prueba”, musitó Nara suavemente.
El archivo que Eric había enviado contenía documentos del acuerdo de Veni con una clínica de belleza, usando el gran nombre de Arshino sin permiso legal. No solo eso: Eric también adjuntó otra carpeta titulada “Adicional: Veni”. Nara la abrió y encontró varias fotos y dos videos cortos. En uno de ellos se veía a Veni sentada en un restaurante lujoso, conversando con un hombre de camisa azul. Parecían demasiado cercanos para ser solo amigos.
Nara esbozó una pequeña sonrisa. Sus dedos danzaron sobre la pantalla y respondió el correo de Eric.
“Buen trabajo, Eric. Guardaré esto para el momento adecuado.”
Unos segundos después, llegó la respuesta de él.
“Cuando necesites mi ayuda de nuevo, estaré listo. P